Parece una ironía que cuando curse una materia denominada "Economía monetaria internacional", el docente nos repetía todos los días una frase de un profesor de una universidad de renombre de EEUU (que no recuerdo ni el nombre del hombre en cuestión ni la institución a la que pertenece) que era algo como "lo monetario es un velo que no nos deja ver lo real". Claramente, es una frase con mucho de cierto y, ciertamente, hay muchos economistas en Argentina que se deberían poner a reescribir dicha frase mil veces en un pizarrón al mejor estilo Bart Simpson.
Voy a ser más preciso, los miembros del Plan Fénix (es interesante que Marcó del Pont forma parte de ellos) se quejan de que la inflación vuelve más cara a Argentina puesto que el tipo de cambio se estuvo moviendo menos que la primera y esto, creen que, perjudica el desarrollo del país. Esto se debe a que ellos creen que el gran crecimiento argentino de la primera etapa del kirchnerismo se debió a tener un tipo de cambio "competitivo". Precisamente, ahí está la contradicción de estos economistas. Creer que se puede crecer (bah, capaz que soy muy generoso con el crecer) a tasas Chinas por más de cinco años y que tu economía no se vuelva más cara, es decir que a igual tipo de cambio (obviando la devaluación del 2008/2009) no haya inflación, es una fantasía digna de un trasnochado. Antes de proseguir, para que no queden dudas ¿Por qué digo que la economía argentina se volvió más cara? Supongamos que el precio del Dólar no varia y aumentan los precios (inflación), entonces si antes necesitaban 100 Dólares para comprar una determinada canasta de bienes, ahora necesitaran más, ergo somos más caros en Dólares -es por eso que el turismo también se preocupa de la inflación. Ahora, pongamos el foco en por qué se trata de una contradicción pensando en un ejemplo "turístico". Muchas veces uno tiende a decir cuando viaja algo como "qué caro que está ese país, es que el cambio (refiriéndose al tipo de cambio nominal o a cuantas unidades de la moneda nacional hacen falta para comprar una unidad de su moneda) no nos favorece". Bueno, este argumento es erróneo. Una pequeña prueba: cuando yo visité Noruega, pagué una pizza miserable 20 Euros o algo como 100 pesos y, según una amiga local, estábamos en una pizzería barata ¡El quid es que esto se dio aunque con un Peso se pueda comprar algo como dos Coronas Noruegas! ¿Por qué Noruega es tan cara entonces? Porque es un país MUCHÍSIMO MÁS RICO que Argentina. Es intuición pura. Pensemos algo similar pero dentro de Argentina, no es lo mismo ir a comer afuera en Rosario que en Resistencia, la primera es más cara ¿Por qué? Porque Rosario es una ciudad más rica. Entonces, es posible desear que Argentina crezca a tasas chinas y no se vuelva más cara. Claro que no. Es tan ridículo como pensar que Noruega se podría volver perfectamente tan barata como Somalía. Hay que entender que el precio del Dólar no es un instrumento mágico, y si se quiere evitar apreciar el peso para mantener el tipo de cambio real en un nivel que no responda a los fundamentos de la economía, entonces solo conseguirá tener inflación y que el país se vuelva más caro a través de esa vía, como paso en Argentina. El modelo del "dólar alto" y sus implicancias para el desarrollo está equivocado desde su concepción, como demuestran estos ejemplos tan intuitivos. Es una contradicción pura querer crecer manteniendo la misma paridad cambiaría sin incurrir en inflación y los debates sobre políticas monetaria son completamente estériles en este contexto, se trata de un fenómeno REAL. En realidad, diferentes políticas monetarias pueden implicar distintos tipos de cambio, yo me refiero, para ser más especifico, a las políticas ideadas para controlar la inflación con el actual tipo de cambio (i.e. la esterilización, otra fantasía trasnochada).
Lic. Fernando Diaz, Juventud Proyeccion Federal.